Cobarde,
eres un cobarde
que no se atreve
a dar la cara.
Ya no me importa
si me odias o me amas.
Has sido una decepción
de la que pienso
pasar página.
Confié en ti,
vendí mi alma,
compartí mis esperanzas
y con esta traición me pagas.
No das explicaciones,
sin pronunciar una palabra
asumes tu culpa
y das la espalda.
Eres un miserable,
un cobarde
que en la noche
se escapa.
¡COBARDE!