Me ha dado un vuelco el corazón
y cómo un aguacero
me han llovido los recuerdos.
Recuerdo el día,
la hora el lugar,
la música lenta,
el humo del bar.
Las horas pasaban
sin parar de hablar
todo lo importante,
lo más esencial,
las risas, la complicidad.
Algo inevitable
al encontrar este chal
guarda tu nombre,
el momento, el lugar.