No quiero nubes
sobre mi horizonte
ni en mi alma
ni en mi vida.
Las apartaré
con las manos
si me llegan,
y sino
apartaré la vista.
No quiero nubes
sobre mi horizonte,
ni en mi alma,
ni en mi vida.
Dicen:
Piensa lo mejor,
espera lo peor
y recibe lo que venga,
Recibiré lo que venga
atraparé lo mejor
y rechazaré
lo que no me convenga.
No quiero nubes
sobre mi horizonte,
ni en mi alma,
ni en mi vida.
Un acto de fe,
un propósito,
una apuesta.
No quiero nubes
sobre mi horizonte,
ni en mi alma,
ni en mi vida.
-Lara-
Me encanta....me he identificado mucho con el texto porque yo tampoco quiero nubes...cuanto más despejado mejor.
ResponderEliminarBesitos
Pues no sé cómo lo vamos hacer ahora que estamos en otoño, seguro que tienes una paleta llena de colores.
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Pienso que somos muchos los que pensamos como tu.
ResponderEliminarNo quiero nubes
sobre mi horizonte,
ni en mi alma,
ni en mi vida.
Un cálido abrazo
Por lo menos tenemos claro lo que queremos....otra cosa es poder evitarlo..
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Uno es el propio patrón de la nave de su vida, así que puede elegir la dirección a seguir.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Si amiga ...pero hay que luchar en contra de la tempestad..
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Vaya, sorprendente poema Lara, mientras lo leía era como si siguiera un hilo musical, muy bién llevadero. Mucho dicen tus letras, invitan a la reflexión, sobre esas nubes que siempre se tienen encima de la cabeza, y que tarde o temprano, todo el mundo las detesta. Preciosas letras, me han encantado , un abrazo amiga.
ResponderEliminarGracias Conchi....intentamos luchas...aunque no siempre lo consigamos.
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