Los recuerdos me hacen volver
a esas cuatro paredes.
Donde me olvido del mundo
de quién soy y de quién eres.
Allí me olvido de todo,
de mis miedos y pesares
y de esa cruz a cuestas
que arrastramos los mortales.
Allí soy feliz, libre.
¡ Bendito instante!
En el que la ternura
sale de los rincones.
Mientras se abre paso
la más loca de las pasiones,
todo son tentaciones,
la boca, las manos.
El fuego en la mirada,
la lengua insaciable,
ávida exploradora,
lujuriosa y pecadora.
Por un instante
desafío los recuerdos
cierro los ojos
y siento tus besos.
-Lara-
Siempre podemos vivir lo vivido, sentir lo sentido, querer lo querido.
ResponderEliminarSolo hay que cerrar los ojos y dejar que nos atrape esa ternura, que como bien dices, escapa de los rincones de nuestra memoria.
Un beso.
Y descuidaste la idea, el perdón y el pecado, ya no hay pecado sólo fue una utopía.
ResponderEliminarAmor, amor sin trabas, amor cuando el amor impera.
¡Bellisimo!
ResponderEliminarMil besos
Es cierto que se notan tus influencias, y bienvenidas,.
ResponderEliminarEmocionas Lara...!!! y eso es muchísimo...!!!